domingo, 8 de junio de 2014

Equipo pequeño, grandes sensaciones

Con la fatal racha de meses sin catar una lubina de mas de medio kilo, decidí, para no aborrecer de lanzar y lanzar y patear acantilados y pedreros, darme un poco al light rockfishing. Ya contaba con una caña de 210 y acción 15-30gr, pero a todas luces me parecía demasiado basta. Hacía el trabajo a medias, aunque me lo pasaba pipa con los chicharros y los microminnow de rio. Así que me compré una vara mas especializada en esta disciplina, como siempre buena bonita y barata, y encontré la Street Fishing de Yokozuna de 5 a 15 gr, acercándome mas a la finura que se espera de este tipo de pesca. Los señuelos por supuesto y las cabezas plomadas iban en el "lote", ambos de la marca hart. 
A priori los chicharros no se hicieron esperar, sacaba uno de tras de otro, las sensaciones con esta caña se amplificaron respecto a la anterior, aunque al carrete, aun sobredimensionado (estoy esperando que llegue el definitivo), no me dejaba saborear bien las batallas. 
Todo esto no deja de ser un mero entretenimiento hasta que trabas la primera lubina de 36 cm, y empieza la batalla con la caña doblada al máximo, entonces empieza la adrenalina a fluir, el coco a pensar estrategias mientras te dices "va a romper el nylon, y si no haber como carajo la sacas desde 3
metros de altura, esta jodido el tema, dale mas hilo, afloja el freno, dirijela hacia la cuesta, callate, no callate tu, callate tu primero, ya esta ya la tengo en seco..."
Ya echaba de menos esa sensación que me inunda cuando trabo una pieza, ese subidón de emociones, y es que el LRF aunque sea pescar con un mini equipo, logra reproducir esas sensaciones que buscamos. 
Tambien es cierto que no habia pescado tantas lubinas
en mi vida pesqueril y en tan poco tiempo, aunque he de confesar que mi especie favorita, al menos de momento, es la boga, que misil la tía, como tira, que potencia sin control, y que incansable, me encanta.
Ahora tengo un poco abandonados los chicharros, aun que alguno sale bien  grande, saco muchas mas lubinas, me obligan a patear y buscar por recovecos y espigones, mientras pienso en un buen cardumen de bogas....


A continuación os expongo las fotos de las capturas del sábado noche, aunque me falta la primera que midió 35 cm y a la que olvidé retratar por estar charlando con unos chavales, mientras la liberaba. Al menos 2 más se me escaparon, lo cierto es que hasta que no ví las fotos no sabia exactamente cuantas habían salido, todas captura y suelta, como las bogas y chicharros, salvo el sanmartín (sacado a spinning) que se va para los fogones.